1. Búsca y selecciona
Recomiendo que hagas una búsqueda exhaustiva por Internet de que tiendas, diseñadores o modistas te gustan. Una vez elegidos, llama, manda un email o concreta una cita desde su página website (la última opción es la más común). Lo ideal es que elijas un día entre semana, los sábados son los más concurridos.
2. Tu Squad
Lo ideal es ir a elegir el vestido con personas que realmente confías y que sabes que te van a decir su opinión sincera tanto buena como mala, y que sean personas que se alegran por ti si te va bien y se preocupan por ti si te va mal. ¿Por qué le doy importancia? muy fácil, no sería la primera vez que una novia se lleva a una persona (familiar o amiga) que le dice que le queda fantástico un vestido cuando realmente no lo cree o te dice que te queda bien porque siempre te queda bien todo, o por el contrario alguien te dice que no te queda bien, cuando el resto de tus acompañantes alucinan con lo preciosa que estas. Entonces, cúbrete las espaldas y elige bien quién te va a acompañar en este momento tan especial. Recomiendo que tus cómplices sean un máximo de 4 personas.
3. Presupuesto
Cuando estas en la tienda normalmente te dejan ver los vestidos que tienen colgados y si no tienen toda la línea de la marca, os enseñan un book con todos los diseños, de esta manera si te gusta alguno que no esta en la tienda pueden pedírtelo. En ese momento es cuando ves los modelos, los complementos posibles para ese vestido y los precios. ¡Eso esta muy bien! así puedes hacerte una idea, económicamente hablando, por donde van los tiros y hasta dónde puedes llegar. Sobretodo sé realista y lógica con el coste del vestido.
4. No me gustaba pero ahora me encanta
Posteriormente elegirás los vestidos que te vas a probar. Recomiendo que elijas los que te gusten y los que te recomienden en la tienda. ¡Sí, en la tienda te van a recomendar vestidos según tu fisonomía y según el estilo de tu boda! eso es genial porqué las dependientas tienen experiencia y pueden saber que te puede quedar bien según tu figura. Aunque no te gusten los que ellas elijan, pruébatelos también, simplemente para estar 100% segura que esos vestidos no son para ti. Piensa que no sería la primera vez que no escogerías un vestido ni loca, y cuando te lo pruebas por recomendación no te puedes creer lo bien que te sienta, ¡así que no cierres puertas!
5. Me lo traigo de casa
Para a prueba del vestido es bueno tener unos zapatos que el tacón tenga la altura que quieras llevar el día de tu boda, también es importante estar depilada y llevar ropa interior bonita de color nude (carne) o blanco. Si llevas maquillaje que no sea en exceso para no manchar los vestidos accidentalmente. ¡Ah! cuando vayas a hacer las pruebas intenta que no sea justo después de comer, no querrás estar con la barriga hinchada.
5. Puntuaciones
Una vez en el probador, toca ver como quedan los vestidos y ver la opinión de tus acompañantes más sinceras. Recomiendo que les des puntuaciones, así será mucho más ameno y tendrás más claro que opinión tiene cada una, y no las escucharás a todas opinando a la vez. Voy a dejar un post con puntuaciones descargables, que me pondré a hacer con mucho cariño estará disponible en la pestaña “Servicios – papelería”, por si alguna de vosotras quiere imprimirlas y utilizarlas.
6. Visita todas las tiendas de tu listado
Aunque te pases 3 horas dentro de una tienda probando vestidos no te sientas con la obligación de comprar y nunca compres en la primera tienda que mires. Si te ha gustado alguno de los vestidos, pregunta si te lo pueden guardar o reservar. En caso de que tengas cita en otras tiendas, espera a ver los diseños de las demás firmas. Siempre puedes volver a este vestido si no hay ninguno más que te haya hecho run-run en la barriga.
7. El run-run
Solo añadir, que lo más importante de la elección del vestido no es lo largo que sea, las incrustaciones que tenga, si es sencillo o no, … Lo más importante es que cuando te veas en el espejo sientas “este es el vestido” o mariposas en la barriga o en ese momento seas consciente de “me voy a casar”. En resumen, el vestido tiene que despertar algo en ti, piensa que solo vas a llevar un vestido de novia una vez en la vida, así que elige el que sea perfecto para ti.
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Fuente: este post proviene de El Edén de Bambi, donde puedes consultar el contenido original.
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