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1. Nunca llevar un vestido blanco. También se incluye blanco roto, beige claro o rosa palo. Piensa que tendrás un montón de días para ponerte un vestido de ese color, ¿por qué elegirlo para una boda? Puede que la novia no se lo tome muy bien si parece que la que se casa eres tú.
2. Prescindir de un vestido negro. No es el color más acertado y que más se relacione con una boda, aunque el protocolo es menos estricto con este color que con el blanco. Si lo puedes complementar con algunos accesorios que sean de colores, entonces es más aceptable así.
3. Un vestido largo sólo para bodas de noche. Resérvalo para estas ocasiones, pero a una boda de mañana se recomienda acudir de corto. En cambio, una boda de tarde o noche, admite ambas cosas.
4. No abusar de los adornos por el día. Los excesivos brillos y complementos es mejor descartarlos, pues la máxima es 'nunca hacer sombra a la novia'.
5. Evitar los tocados por la noche. Este complemento se reduce a las bodas de día, al igual que las pamelas. Si decides apostar por un tocado para una boda de día, lo recomendado es que no te lo quites hasta llegar a casa, de lo contrario irás despeinada.
5. No ir con mucho escote. Esto también incluye excesivas transparencias, faldas muy mini... Si es una boda religiosa con más motivo. No se trata de ir tapada hasta el cuello, pero sí de tener en cuenta un mínimo sentido común y de decoro.
6. Procura no cambiarte los zapatos. Lo mejor, es esforzarte desde el inicio para elegir unos zapatos cómodos que no requieran que te los cambies en plena boda. Son parte de tu look y sin ellos lo estropearás. Esto es algo difícil, teniendo en cuenta que ya en muchas bodas se ofrecen zapatos planos como regalo para no parar de bailar.
7. No llevar pajarita ni corbata negra. Las pajaritas son sólo para los esmoquin y las corbatas negras, aunque se pusieran de moda, equivale al vestido negro de la mujer.
8. No te pongas ni frac ni esmoquin. Si acudes a una boda de etiqueta, la costumbre es llevar chaqué. Además, si llevas trajes, se recomienda no quitarse la chaqueta. No podéis ni aunque se la quite el novio.
9. Menos es más. Ni relojes gigantes ni joyas o bisuterías exagerados. Llevar bisutería sencilla es mucho mejor, ya que demuestra que tienes gusto y elegancia.
10. Evitar las gafas de sol. Sí, es difícil en una boda de día en pleno agosto, pero no son para un look muy formal. Mejor quitárselas y mostrar tus ojos y emociones.
11. Nunca dar sobres con dinero. Pasado de moda. Es mejor dar el regalo antes o después, ya no porque lo diga el protocolo, sino porque para los novios tampoco es práctico. ¡Piénsalo!
12. Evita estar pegado al móvil o celular. No es correcto, parece que lo de tu alrededor no te importa y parecerás un adolescente. Relaciónate con los demás.
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13. Sustituir el arroz. Una tradición muy arraigada, pero un poco incómoda. Se puede mantener el mismo significado con unos bonitos pétalos de flores o una pompas de jabón.
14. No te levantes de la mesa del banquete. Por mucho que se retrasen los platos, permanece siempre en tu sitio y aprovecha para entablar conversaciones entre plato y plato.
15. No comiences a bailar el primero. Primero el turno lo tienen los novios y los padrinos. Cuando todo el mundo se anime, ¡ese es el momento!
Son muchas normas y si no quieres llevar la contraria debes respetarlas. Es verdad, que cada vez son más las bodas que rompen con cualquier tipo de protocolo, como por ejemplo, en una boda ibicenca el requisito es asistir de blanco. O también, las tendencias permiten los vestidos largos de día o los brillos por el día.
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