AHORA EL TURNO ES PARA LOS MAS PEQUEÑOS DE LA CORTE
El momento tierno y gracioso de la boda, corre por cuenta de los más pequeñitos. Verlos desfilar tan hermosamente ataviados nos llena de alegría, de entusiasmo, y en ocasiones de tensión.
Los niños son por naturaleza imprevisibles, sea cual sea su carácter, personalidad o edad. Pero al mismo tiempo son muy responsables si conocen la importancia de su tarea y se sienten protagonistas.
Siempre hay que tener claro que son niños, y por lo tanto imprevisibles y espontáneos, por lo que no hay que hacer drama si actúan como no se espera, porque ellos constituyen la parte más tierna de la ceremonia y hagan lo que hagan, serán disculpados.
Primero que todo debemos recordar que ellos son niños… aquí no vale elegir al mejor candidato, ni a quien lo vaya a hacer mejor, ni al que le siente mejor el traje, ni al más dócil… son los niños de la familia o de los amigos, y ellos van a contribuir y a participar activamente en un acontecimiento familiar muy importante.
Estos pequeñitos se distinguen de los demás, por la forma de ir vestidos. Mi recomendación es no ataviarlos con trajes con los cuales se van a sentir incómodos. Su vestuario será acorde con lo especial del evento. Respetaremos sus gustos y les dejaremos elegir dentro de un margen, para hacerles partícipes activos y que que sientan que han sido tomados en cuenta, y que no se sientan como instrumentos decorativos.
Hay que explicarles que el fotógrafo va a hacerles fotos donde estarán muy bellos, y que para eso es importante que sonrian.
Al momento de escoger a los niños que nos acompañarán en la corte, tenemos que tener en cuenta algunos puntos, tales como:
Que sean mayores de cinco años para que asuman su responsabilidad.
Si eliges a niños menores de esa edad, toma en cuenta que difícilmente entrarán y saldrán de la iglesia en perfecto orden. Pero en ocasiones he tenido niños muy pequeños, y muy disciplinados que se toman en serio su papel, ellos son niños que con un ensayo aprenden lo que deberán hacer en esos momentos.
La corte puede ser de solo niñas, solo niños o mixto.
Que no sean más de seis niños, para que sea fácil de controlarlos.
Es recomendable asignarles un papel específico para que se sientan importantes y se desenvuelvan con entusiasmo.
Me he encontrado con niños que al llegar el momento sufren de pánico escénico, sueño o cansancio y se niegue a entrar a la iglesia. Mi recomendación es que disfrutes el momento, al fin de cuentas, son solo niños.
Si deseas que las madres de los niños participen en la elección del vestuario, debes ponerte de acuerdo con ellas y elegirlo juntas. De lo contrario será mejor que tu elijas lo que ellos llevarán, indicándoles el lugar donde podrán adquirirlo o comprar las telas y accesorios.
No involucrar muchas personas en escogerles el traje, ya que entre más opiniones hayan, más confusiones tendrás.
No olvides comprar un pequeño obsequio de agradecimiento a todos tus pajecitos...Ellos se lo merecen