Funciones de las damas de honor
¿Cuántas damas de honor podemos ser? Lo normal es que sea entre 3 y 8, pero es libre elección de la novia. Además, siempre suele haber una primera dama de honor que se encarga de las funciones de más peso y será el testigo.
La primera norma evidente es conocer al resto de las damas de honor. Necesitáis coordinaros para ayudar en lo posible a la novia. Dependiendo de cada boda, puede que os encargéis de las invitaciones y demás servicios, pero cada vez son más los novios que prefieren elegirlo a su gusto.
El día de a boda, ¡la novia es la protagonista! Tendrás que estar disponible para ayudarla con el vestido, el velo, el ramo y todo lo que requiera. Una de las cosas más importantes es que si entras junto a la novia nunca debes faltar a los ensayos para que así sepas donde debes estar.
El vestido de las damas de honor
Hay mucha tradición en cuanto a los vestidos de las damas de honor. Que si deben ser iguales, que si no pueden ser blancos para no eclipsar a la novia, que si deben ser en tonos pasteles,... Un montón de reglas que ya no se cumplen. La novia no puede cortar tu personalidad, pero si puede establecer unas bases que es preciso respetar.
Por ejemplo, si la novia quiere que sus damas de honor vistan de rojo, cada una se puede adaptar el vestido a su gusto, pero dentro de un límite para que exista una armonía de conjunto. Piénsalo, las fotos pueden quedar muy divertidas y bonitas.
Otra opción puede ser que la amonía se cree por el corte del vestido, es decir, que todas llevéis el mismo vestido pero de diferentes colores. También, es posible que tengáis que llevar un ramo o bouquet al juego del de la novia.
Despedida de soltera
Una función muy importante que no debéis olvidar es que os tenéis que encargar de la mejor fiesta de las vida de la novia: ¡La despedida de soltera! Cada vez surgen propuestas más originales y divertidas para hacer en este día. Tener en cuenta los gustos de la novia, pensar en ella, no en vosotras.
¡Es una noche de chicas! La clásica cena y salir de fiesta es un plan que nunca falla, pero hay muchas otras alternativas como una sesión de automaquillaje, una fiesta pijama, un vuelta en una súper limusina. Si la novia no es de boys ni de disfraces por la calle, no os lo planteéis, porque lo único que hará será pasar un mal rato. ¡Ánimo y disfruta de ser la dama de honor!
Agradecimientos: Fotos de El blog de rosa Clará; Mi boda DIY; Bodas con detalle; Plum Pretty Sugar/flickr (CC BY 2.0); Susanne Nilsson/flickr (CC BY-SA 2.0)