En éste post quiero dar algunos tips básicos para que las novias que no saben por dónde empezar a la hora de elegir el estilo y colorido predominante en su boda, lo tengan un poquito más claro.
Así que cierra Pinterest durante un minuto, deja de lado tus ideas preconcebidas y sigue estos cinco pasos para elegir el estilo de boda perfecto para ti.
Paso 1 ¿Qué te enamora?¿y a tu pareja?
Todos tenemos cosas que nos parecen especialmente agradables visualmente, y normalmente elegimos esa misma línea tanto para nuestro día a día, tanto en decoración del hogar, como en los colores, patrones y estilos que llenan nuestro armario, eso va definiendo nuestro estilo.
Por lo que es muy recomendable seguir en esa misma línea. Os pongo un ejemplo para que lo veáis más claro.
Puede ser muy tentador hacer un cambio radical, y elegir un estilo basado en las últimas tendencias, piensas, "mira esa preciosa boda boho con toques del desierto", sin considerar que en vuestra vida cotidiana estáis impresos por un estilo clásico, que se aleja totalmente de ese tipo de boda.
Así que el punto de partida para encontrar el estilo de boda ideal, es siempre uno mismo.
Paso 2. Define tu estilo de boda.
Considera la esencia que quieres que tenga tu boda. ¿Informal? ¿Sofisticada?¿Tradicional? ¿Como una cena con amigos o como un elegante cóctel? Habla de esto y, crea un tablero de inspiración, con imágenes que representen ese esencia para ti (no tienen que estar relacionadas con la boda).
Ahora es el momento de definir esa esencia y el estilo o los estilos que ocuparon el paso 1.
Ahora propón una palabra para ello, puede parecer innecesario, pero realmente será útil para comunicar tu visión a tus futuros proveedores.
Puede ser algo muy definido como “estilo rústico con toques románticos” o “botánico vintage”, pero también puede ser algo mucho más impreciso como “estilo naútico” o “glamouroso”.
Paso 3: Elije el lugar de la Ceremonia.
Puede ser que antes de estudiar el paso uno, ya tengáis elegido el lugar de la ceremonia. Pues bien, yo recomiendo hacerlo al revés, ¿Por qué? Por qué si la finca tiene un aspecto muy específico o una paleta de colores, toca trabajar con eso si o si.
A veces eso significa incorporar el estilo del lugar a tu propio estilo (paso 1) y hacer las modificaciones necesarias hasta que casen a la perfección, lo que se traduce en usar una decoración neutral y dejar que el entorno hable por sí mismo.
Paso 4: Reduce tus colores.
Y finalmente, llegamos al color. A menos que un color en particular sea uno de tus elementos indispensables, tu paleta es algo que debería desarrollarse armónicamente a partir de tu estilo nupcial, y no al revés: ese es un error que muchas novias cometen y lamentan más adelante.
De todo el trabajo que has hecho hasta ahora, ahora deberías tener uno o dos colores que están comenzando a abrirse camino y que empezarán a unirse al resto, por ejemplo “boho folk” con base de fucsia, y naranja agregando tonos bronce.
¿En qué estación te casas? No tienes porque elegir las mismas paletas cromáticas que el otoño o primavera.. pero la estacionalidad es un gran factor que contribuye al estilo de la boda.
Piensa en qué flores y alimentos están en temporada, los colores que aparecen en la naturaleza en esa época del año y los que ayudarán a crear la atmósfera que deseas, por ejemplo, un lugar soleado al aire libre o acogedor en el interior.
En éste punto deberías de tener sólo dos colores de base.
Paso 5: Juega con tu paleta
Como ya tienes tu color o máximo dos colores predominantes, ahora toca trabajar en una gama de tonos complementarios.
Comenzarás con los colores que ya conoces. Seguimos con el ejemplo anterior, “boda boho folk” tenemos el fucsia y naranja, al que uniremos tonos pasteles como el rosa palo, y melocotón, con toques tierra y tonos bronce.
Cuando te hayas decidido por una combinación que te guste, es hora de combinarla y crear un tablero de inspiración. Y ahí tienes. Estilo de boda y colores definidos, ya estás preparada para empezar a planificar tu boda.
Imágenes: Pinterest (sí, lo reconozco, estoy enganchada)
Fuente: este post proviene de Mis Secretos de Boda, donde puedes consultar el contenido original.
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