Si hace unos años nos hubieran preguntado si es posible encontrar el amor a través de internet seguramente todos hubiéramos contestado que no, que era algo casi imposible. Pero los tiempos han cambiado y hoy en día la realidad es otra muy diferente.
Y es que el amor aparece cuando menos se espera, ¡y donde menos se lo espera! Y eso es lo que les ocurrió a Gabriel y María, que comenzaron con una amistad cibernética ¡que acabó convirtiéndose en amor verdadero!
Una pedida muy romántica
Convertir un momento mágico en algo inolvidable era la prioridad de Gabriel y en lo que pensaba cuando ideó la manera de sorprender a María con una pedida muy romántica.Así que eligió el lugar ideal: el Parque Grande. Preparó un camino con pétalos de rosas en el Laberinto de Rosas para que cuando María llegara al final se escuchara la canción Hasta mi final mientras él se declaraba.
Unos meses después, el 7 de Julio de 2018 por fin se daban el Sí, quiero en la Basílica del Pilar, para luego celebrarlo en el Hotel Castillo Bonavía.
Los momentos previos
Todos los novios sufren en mayor o menor medida los nervios previos a la boda y eso es lo que le sucedió a estos novios. Especialmente a María. Que apenas pudo dormir recordando la pérdida de un ser tan querido como su padre. Por ello, encontrar la manera de poder llevarlo consigo (por ejemplo, en el ramo y con el recuerdo de una foto de la boda de sus propios padres) en su gran día, fue la manera que encontró María para poder compartir su gran día también con él.Y llegó el gran día
María y Gabriel escogieron la Basílica del Pilar para la ceremonia religiosa, una elección que tuvieron clara desde el principio.Verse por primera vez frente al Altar fue sin duda, el momento más emocionante para esta pareja que hizo que se fusionaran en un emotivo abrazo.
Ver a su mujer cantar una canción muy especial fue otro de los momentos inolvidables para Gabriel. Como también lo fue el emotivo vídeo con fotos de los novios desde la infancia hasta su vida como pareja. Y por supuesto, no faltaron los momentos más divertidos: una amigas bailando por sevillanas y contagiando con su alegría tanto a la novia como a su madre.
Más detalles
Una boda de carácter romántico y una celebración especial en un elegante Castillo. Unos deliciosos aperitivos para el cóctel, el cortador de jamón, la pulpería y para el banquete: un sorprendente Canelón de bogavante, sorbete de limón al cava y un tradicional plato, el ternasco lechal de Aragón, el triunfo del vino blanco (NY HOOD), sin olvidarnos del carro de Cava ¡espectacular!.Los novios guapísimos con sus respectivos y elegantes trajes de novio y novia, este último con una cola larguísima que apenas la dejó bailar ;). Fotocall, fotomatón, candy bar y chapas divertidas para los invitados con frases molonas Y no faltaron tampoco el Cuadro de huellas, la bengalas para el baile nupcial y el tradicional libro de firmas para el recuerdo de ese gran día.