Lo que hubo entre Alexia y una servidora: feeling, feeling y más feeling.
Porque resulta que a día de hoy nuestra relación personal sigue, y esas conversaciones de Whatsapp infinitas siguen ahí, con la misma frecuencia que hubo en el momento “preboda”, y las risas y las bromas no se han terminado, siguen ahí.
Cuando conocí a Alexia no solo es que hubiera un feeling increíble entre las dos, es que Alexia era como yo, una loca furiosa!!!…jajajaja
Tenemos el mismo pronto, el mismo genio que luego se queda en nada, pero madre mía que Dios se apiade de la pobre víctima que sufra nuestra primera embestida!!!..jajajajaja
Pero luego mi Alexia, como yo, nos quedamos en nada, somos todo amor y corazón….y es que en este tiempo que hemos pasado juntas, hemos tenido tiempo de todo, de reírnos, de llorar, de corrernos alguna juerguecilla juntas y hasta de decirnos las cosas a la cara tal y como son. Eso fue lo que hizo que nuestra relación fuera totalmente real.
Un año de preparativos, que con sus parones lógicos, hizo que cada vez nos fuéramos conociendo más y más. Alexia lo miraba todo con lupa, todo, todo, todo, presupuestos, opciones, etc…porque tenía claro lo que quería y lo que no quería, y el ir realizando poco a poco el puzzle de lo que seria su boda, fue sobre todo divertido.
Pero llegó el día de su boda y esa novia que tanta guerra me había dado, esa novia a la que adoraba literalmente, esa novia con la que tanto luché para que hiciera las cosas como yo le decía y pusiera esto aquí de deco y eso allí de luz, y esto hazlo de esta manera y aquello de la otra, y que no llegaba a imaginar lo que yo tuve en mi cabeza desde el primer día, cuando llegó a la finca para vestirse y entró en el jardín, rompió a llorar. Y no es que me gustara verla llorar, que también un poco, jejejejeje, es que el significado de esas lágrimas lo eran todo para mi, porque eran lágrimas de alegría, lágrimas de ver que todo lo que había soñado, todo lo que yo había intentado trasmitir de alguna manera, estaba ahí tal y como ella lo había soñado.
El poder trasmitir algo que no existe, algo que se hace única y exclusivamente para ellos es muy difícil, ya que el personalizar algo es lo que tiene, que tiene que existir confianza, confianza ciega en nosotras de que todo va a salir tal y como os contamos.
Y para ello ponemos literalmente la piel y el alma y nos desvivimos por todas y cada una de nuestras parejas, porque lo que viví con Alexia compensa con creces todo el trabajo y sacrificio que implica la organización de la boda. Y si encima te lo agradecen de la manera que lo hicieron ellos y sus invitados, pues compensa hasta el infinito y mas allá (aunque Nuria sigue indignada porque Alexia solo la mencionara porque se portó bien con sus amigas jajajaja).
Lo que quiero transmitir es que con este tipo de relación es imposible que no llorara como una tonta cuando la vi vestida, imposible de los imposibles, así que ahí estábamos las dos llorando como dos niñas pequeñas. Y al final, si me tengo que quedar con algo, me quedo con eso.
Lo que se vivió allí ese día fue una boda, pero ante todo fue una fiesta, una súper fiesta en la que tanto Alexia y Rober, como los invitados lo pasaron no bien….lo siguiente!!!!
Y de mi Rober qué os voy a contar? Os puedo contar que le adoro, aunque suene muy típico, pero es que es la verdad, es literalmente adorable, es el chico que el primer día que le conocí para firmar el contrato, me enseñó sus gemelos “frikis” de Mortal combat para el día de la boda, el que siempre me recordaba lo que nos parecíamos Alexia y yo, aquel que no lloró cuando entró a la finca el día de la boda, pero de su cara y de sus ojos salían borbotones de sentimientos. Ese heavy “depurado” que consiguió llegar a nuestros corazones y que no solo es bueno, pero de verdad, es que es lo mejor.
El chico de la pajarita de calaveras, con los ojos llenos de mas amor y de alegría, que he visto en muchas bodas, en definitiva y sin mas “mi Rober”.
Por todos estos motivos (muchas veces lo digo y sé que suena a topicazo) tenemos suerte, suerte de que lleguen a nosotras parejas como Alexia y Rober, parejas que nos dan mucho y que saben agradecer lo que nosotras les damos, porque lejos de ser un trabajo y haber un contrato de por medio, esto pasa a ser mucho más y la prueba de ello es que a día de hoy siguen en nuestras vidas y espero y deseo que esto sea así siempre, porque la vida hay veces que pone en tu camino a personas especiales que pasan a formar parte de ella y afortunadamente se quedan ahí para siempre.
Y es que la boda de Alexia y Rober, no son solo Alexia y Rober, tiene mas nombres propios, que para mi ese día significaron mucho mas, esa boda se llama también Mr. Pollo, Maria, Andrea, Aida y Christian, Cris y su (eterno enamorado)…juro siempre que de una boda saco otra, pero es que estos dos están hechos el uno para el otro….jajajajajaja, y como olvidarnos de Chema, la boda no hubiera sido lo mismo sin el y sus “momentos totales”, ese Chema bautizado ahora como el nuevo “Alan”, por cierto chicos quiero ese selffie, de ese momento que solo nosotros conocemos…jajajajaja, y muchos mas amigos de Alexia y de Rober, que se portaron conmigo como si fuera ese día una mas de su circulo, y es que son personas que nos llegaron tan, tan dentro, que sinceramente me niego a desprenderme de todas y cada uno de ellos.
Y nuevamente vuelvo a decir, ADORO ESTA PROFESIÓN DESDE LO MAS ADENTRO DE MI SER.
Y bueno después de haberme puesto ñoña en nivel máximo, mucho más de lo que suelo ponerme normalmente, ejem…ejem…quiero contaros lo que hicimos en la boda de Alexia y Rober.
Tengo que decir que no solo es mérito nuestro que todo saliera perfecto; mucha culpa de que todo salga redondo la tienen el gran equipo profesional del que solemos rodearnos, iluminación, Dj, Catering, etc…
Trabajar con personas con las que estás en perfecta sintonía a nivel personal y cuya experiencia en el sector está sobradamente demostrada, implica asegurarte el éxito de la boda, mis chicas Lola y Elena, de El Laurel catering, a las cuales adoro y hace que con ellos nos sintamos como en casa, aunque esta vez tuve que cambiar a mi Mane por Pablo…jejejejeje, como siempre un 11. Victor de Music Eventos, con su profesionalidad y su buen hacer con el cual conseguimos hacer trabajos tan maravillosos como este, y como no el gran equipo de formamos con Santiago Bargueño en fotografía y Carlos Castillo en video, dos pedazos de cracks que nos permiten enseñaros nuestro trabajo y el sentimiento real de ese día, tal como fue, y como siempre con un trabajo impecable.
(Un secreto…. mañana no os perdáis un nuevo post en el blog con un super video de la boda de la mano de Carlos Castillo, en el que se vive esta boda al 100%)
Y dicho esto…al lío!!!
La boda de Alexia la realizamos en una finca en Navalcanero (Madrid). En la pradera de la finca distribuimos los distintos espacios de la boda. Una zona para la ceremonia civil, una para el cóctel, otra zona para la cena y por último una pequeña carpa para la barra libre.
Llevábamos mucho tiempo con ganas de hacer una ceremonia civil como la que hicimos en la boda de Alexia y Rober, una ceremonia con un backdrop con una chimenea acompañada de damajuanas de distintos colores con helecho y un barril como mesa para el oficiante acompañado de troncos con botellas con flor que junto con sillas, sillones y bancos de diferente estilos y colores, dieron un toque precioso al conjunto.
En el cóctel pusimos distintos rincones decorativos, empezando por un rincón de bienvenida en el cual las invitadas podían encontrar los cubretacones y donde nuestro personal les ayuda a elegir la talla y ponerlos. Ya en la zona del cóctel un libro de firmas con unos sobres en los que los invitados metían unas hojas personalizadas en las cuales “recordaban su mejor momento con los novios”, o “les ayudaban con la elección del nombre para su primer hijo” también “les daban consejos para un buen matrimonio”, y alguna que otra opción más.
También se puso un Photooboth para esas típicas fotografías elegantes que suben a Facebook los invitados con esas poses como sacados de Vogue. En esta boda fue una combinación de sillones, alfombra y palets.
También hubo un rincón con fotografías de los novios con los invitados expresamente dedicadas. Cada uno se buscaba y se llevaba la foto de recuerdo. Y cómo no, un seating plan, esta vez con tablas de madera en las que aparecían las listas de las mesas combinadas con tiestos con flor.
Una decoración con lo justo y necesario, ni más ni menos. Siempre que nos llegan novias les aconsejo un mínimo de rincones en el cóctel, principalmente para que no quede desangelado ni pobre, pero tampoco abusar. Y los rincones que pusimos en la boda de Alexia y Rober fueron esos, los justos y necesarios.
Ya una vez en la zona de la cena, una maravillosa combinación de luces de verbena con bombillas de resistencia suspendidas sobre las mesas imperiales, hizo un precioso y maravilloso conjunto.
Las mesas se componían de sillas Tiffany con manteles blancos, caminos de arpillera y centros de mesa con distintas combinaciones de plantas con unos bajoplatos de rafia. Unas mesas preciosas, sencillas y elegantes.
Los novios se sentaron solos. Su mesa llevaba una preciosa guirnalda llena de verde y de hortensias. Copas de color y una vajilla diferente. Y quedó espectacular. De boda de cuento.
Al ser mesas imperiales, se pusieron marca-sitios para todos los invitados, con sus regalos en cada plato y minutas personalizadas, y toda la papelería de la boda fue diseñada por Cristina, amiga de la novia. Cada detalle se cuidó al máximo. Y es que en esta boda, no se dio puntada sin hilo.
Por esto y por mucho más, no podemos estar más orgullosas ni más contentas del trabajo que realizamos en esta boda, pero es que verdaderamente el secreto está en la confianza, en que nos dejen hacer y en saber que el día de la boda todo saldrá simplemente GENIAL.
Y ya sin más os queremos enseñar la boda de Alexia y Rober, la cual esperamos no que os guste, ¡¡¡que os encante!!!!
Organización, diseño y decoración: Colores de Boda
Fotografía: Santiago Bargueño Fotografo
Vestido novia: Glamour novias
Zapatos: Aldo
Ramo: Gloxinia
Catering: El Laurel
Iluminación: Music Eventos