Todos los listados, ya sean de 5, 6, 10 o 20 cosas tienen muchas en común: relájate, desconecta, busca un rato para los dos, hazte un masaje (o dos), daros alguna sorpresa… Y yo los leía y veía aquel 7 de Septiembre como un día idílico en el que todo era calma y tranquilidad…JA! Eso está muy bien si tu vida es, por normalidad, calma y tranquilidad… pero si tu vida es como la mía (y más aquel año) que parece que estás viviendo en una montaña rusa, que un día subes, al otro bajas y a la media hora has decidido que vuelves a lo más alto…. si a ti te relaja estar con mil y una personas y te estresa que te toquen la cara… Entonces amiga, entonces, olvídate de esos listados.
Tengo que reconocer que me obsesioné con aquellos listados. Mi día previo a la boda tenía que ser así porque era lo que todas aquellas páginas de Internet decían y claro, ¿cómo no iba a ser mi día previo así? Y llegó mi día previo… y… ¿dónde estaban aquellos listados?
Apenas me había levantado de la cama y mi prima me estaba llamando que ya estaban entrando en Gijón que les diera mi dirección… pero vamos a ver familia… que son las 9 de la mañana y venís de Extremadura ¿se puede saber a qué hora habéis salido?? Así que allí estábamos mi futuro marido y yo, sin desayunar y con los Castillo entrando por la puerta uno detrás de otro… Y la casa llena de trastos a los que sumarles las maletas… La abuela que pide agua, que viene agotada, que si quitarme la faja que no puedo más (abuela señora, ¿para un viaje de 8 horas y te has traído la faja puesta???) LLama al resto de la familia a ver por dónde viene (y cruza los dedos para que te digan que aún les quedan un par de horas) Y entre cafelito y cafelito (aquel día apuntaba maneras y había que empezar fuerte) tomar las llaves de mi coche e iros a ver Gijón que es muy bonito y tú abuela venga, para casa de mi madre que yo me voy de sesión de belleza!!! Uñas y pies y madremíaqueestrés que mira qué horas son y yo aquí sentada… ¿Y en los listados de marras decían que esto era lo que había que hacer porque relajaba? Pues no funciona… Yo quería ver mi móvil, saber si parte de mi familia se había perdido por Gijón, si mi chico había terminado con los programas, si el resto estaba ya por tierras asturianas.. Al salir en mi móvil 200 mensajes… Corre!!! Ha llegado toda la familia y hay que comer!!!
Y ahí estamos… porque quién quiere irse de restaurante el día antes de la boda pudiendo comer en casa de la señora madre con el resto de la familia apretados, en vajilla de plástico y menú de camping y playa: ensaladilla rusa y empanada para todos!!! Me río yo de La Fiesta de Blas de Mecano… Y no entrábamos en el salón, si la coca cola estaba en el otro extremo de la mesa se te calentaba mientras te la pasaban, si te sentaste al fondo ni se te ocurriera decir que tenías que salir a algo, teníamos que tener los dibujos puestos en la tele por las niñas, las gatas estaban debajo del sofá atemorizadas y creo que todo el vecindario se entero de nuestras conversaciones porque hablar bajo no es lo nuestro….
¿Venía una comida de este tipo en alguno de esos listados que yo había leído tantas veces? No… era la anticomida del día antes de la boda… pero fue una comida de risas y carcajadas. De ver a mi familia paterna por primera vez en Asturias a todos por un motivo de celebración… Todos estábamos cansados, nerviosos pero estábamos. Y llegó mi hermano de trabajar… y en salón no cabía ni un alfiler más. Y mi señora abuela, con sus 85 años y sus 700km de viaje metidos pal cuerpo le soltó un ”niño, que estamos muy lejos, mira a ver si no te quieres casar tú también y aprovechamos el viaje!” Y yo creía que inundábamos aquel salón con las lágrimas de risa que echamos todos a la vez.
De repente alguien exclamó ¡¡venga, venga.. que mañana tenemos una boda y hay mucho por hacer!! Y cada uno a lo suyo. Que si yo tengo que dormir la siesta, yo acabar de coser el traje de las niñas, yo terminar de imprimir unas cosas y nosotras a recoger el vestido de la novia! De camino nos encontramos a varios amigos y tenemos con todos conversaciones acerca del tiempo ¡cómo salga este día mañana va a ser perfecto!. Recogemos el vestido y nos vamos para mi casa… Y en unas horas allí está todo el mundo de nuevo… Metiendo cosas en cajas. Son más de las siete de la tarde y todavía no hemos ido al restaurante a llevar nada. Está todo aquí. Mi pasillo es una sucesión de cajas vacías y mi casa es un montón de gente intentando ayudar diciendo “meto esto? esto también es? esto otro también?” yo empiezo a ponerme nerviosa y empiezo a decir que si a todo. Si, si, si, si, si. ¡Pues anda que no lleva cosas esta boda!
Y ahora sí… de repente… ¿pero qué hora decís qué es???? KIKEEEEEEEEEEEEEEEEE!!! Que nosotros teníamos que ir en una hora a buscar a mi amiga al aeropuerto!!!!Llama a algún amigo tuyo y que vaya por favor, nosotros no llegamos! Y Roberto dice que sí, que él va… Y yo llamo a mi amiga y problema… apagado o fuera de cobertura. ¿Y ahora cómo aviso yo a esa pobre mujer de que un desconocido la va a ir a recoger al aeropuerto y que se tiene que venir con él? Que sea lo que Dios quiera. Y pienso que cuando hace dos meses vino a mi despedida de soltera también le envíe a una amiga a recogerla… Llamo al amigo de Kike, ” Roberto mira no puedo avisar a mi amiga que vas a ir tú, tiene el pelo muy corto y gafas y este es su nombre”. Por suerte, mi amiga tiene un nombre muy raro por lo que al escuchar a un desconocido decir bien su nombre pensó que igual si era verdad que iba de nuestra parte y se montó en el coche con él…. Soy una amiga de lo peor. Lo sé.
Mientras mi amiga volaba, llegaba a Asturias Patria Querida y se dirigía a mi casa con un desconocido nosotros cargábamos la furgoneta de mi tío (y menos mal que había alquilado una furgoneta de las grandes para venirse a la boda) con todo lo que habíamos metido en las cajas… Furgoneta grande cargada, Seat Ibiza cargado… Mis tres tíos hombres ejercen en estos momentos el papel de “la novia no tiene padre y este es nuestro momento” y dicen que ellos se vienen a descargar y preparar y que las mujeres se queden cenando, se montan en la furgoneta, mi chico se pone al volante del Seat Ibiza, yo de copiloto y rompo a llorar por unos minutos. Mi madre se asoma por la ventanilla. ¿Qué te pasa? No lo sé!!! ¿Dónde está el día perfecto de los listados? Me lo han robado!!!!
En 40 minutos estamos tomando (literalmente) el lugar de la boda… LLenando los despachos de cajas. Mis tíos alucinan con el lugar escogido y aún es de noche. Yo no veo más que cajas y comienzo a ver cosas que no son de la boda… ¿qué hace aquí mi joyero? No tengo tiempo para preguntas. Aquí está, pues aquí se queda… ¿Perdona??’ Qué hace mi vestido de novia en el suelo? “Ah! pero eso es tu vestido de novia?” Hombres…. Subo a la suite.Cuelgo mi vestido de novia. Es tan bonito. Lo miro. Lo toco. El personal del hotel me dicen que es muy bonito y que subieran varias veces para asegurarse de que no se cae. Gracias! Mis tíos siguen descargando cajas…. madre mía, parece que vamos a montar un mercadillo. Yo miro al director del hotel y le digo: te prometo que este desastre mañana se transforma en una boda glamurosa, de verdad. Terminamos con las cajas y nos vamos para Gijón. Mamá, todo listo. Me voy para casa, mañana nos vemos!
Y en mi casa están mis primas que duermen allí… Y llega el amigo de Kike y mi amiga. Y con ellos el drama. Yo abrazo a mi amiga en el pasillo y lloro. Lloro mucho. Lloro y la abrazo muy fuerte y sin saber porqué. Kike y su amigo nos miran. No sabe qué me pasa. No lo sé ni yo. Mis primas también me miran. Y yo aún con lágrimas en los ojos les digo aquello de “habrá que pedir unas pizzas,no?” porque una llora pero el hambre no lo pierde nunca… Y allí se van los hombres en busca de las pizzas prometidas. A su vuelta el amigo de Kike me dice: mira, tarrina de helado de 1 kilo!!! ¿te gusta?. Pobrecito mío… me ha visto llorar desconsolada y se le ha ocurrido comprarme helado para que me lo coma a cucharadas. De película pero fue un gesto muy bonito. Cenamos, nos reímos, escuchamos los voladores y dijimos que era por nosotros, terminamos de hacer alguna que otra cosa que quedaba pendiente y a las 2 de la mañana… colgamos nuestra última foto en fb como solteros, foto que saqué y colgué al revés ( y que os la pongo también al revés porque esta es ya “nuestra foto del revés!”) … y pusimos fin al día!
No hice ninguna de esas cosas que (se supone) se deben hacer el día antes de la boda… pero os puedo asegurar que disfruté como una enana de los míos a pesar de que llegaran y yo aún no me hubiera tomado el café, lloré de la risa varias veces al día, me sentí arropada (y no sólo literalmente) por todos los míos, me acuerdo de mi prima cada vez que abro el armario y veo esa botella de sidra achampanada que compró cuando la envíe a comprar sidra, me parto yo sola al recordar a mi tía comiéndose las manzanas que eran parte de la decoración de la boda, me sale una sonrisa de oreja a oreja cada vez que nos recuerdo en aquel salón… porque al final, las normas están para saltárselas y los listados para dejarse las cosas pendientes….