Las dietas disociadas se basan en separar los alimentos según el grupo al que pertenezca. Uno de los pilares básicos de estos regímenes es no mezclar proteínas y grasas con hidratos de carbono. Lo positivo es que no hay límite respecto a la ingesta de los alimentos, basta con repartirlos en seis comidas y no pasar hambre.
Se considera una dietas disociadas con la que se pierde bastante volumen de manera rápida, hasta tres kilos en unos siete días. Su base se fundamentaría en mezclar hidratos de carbono o proteínas con verduras, pero nunca juntos. Los hidratos se consumirían en las comidas, mientras que las proteínas se dejarían para la cena.
Sin embargo, según sus detractores, seguirla más de una semana puede ser nocivo para la salud. Algunos expertos advierten de que puede producir un peligroso aumento del colesterol y los triglicéridos, además de daños renales y un sinfín de efectos secundarios.
¿Qué opináis de esta dieta? ¿Alguna la habéis hecho?