Pero cosas de la vida, que un buen día llegas a la obra (como cada día del mundo mundial para ver cómo han puesto esa piedra que ni tan siquiera se ve pero que te hace una ilusión tremenda), miras hacia arriba y ves un andamio sucio, feo y destartalado muy propicio para una de mis tantas barbaridades. Y de la noche a la mañana ideas un desayuno para tu marido en las alturas. Si, Si! Un desayuno en el andamio! ¿Locuras? Pues ya veréis dónde se subió nuestra preciosa Joanna para hacer las fotografías de la deco… (si estás suscrito a nuestra newsletter, que no es lo mismo que al blog, podrás conocer antes que nadie todo lo que sucede entre bambalinas. De esta manera nos conocerás más a fondo y verás las locuras que realizamos a veces. El pasado miércoles enviamos unas fotos del making of de este bonito shooting. Si aún no estás suscrito, puedes hacerlo aquí)
Para decorar el precioso y antiguo andamio, usé diferentes utensilios que tenía por casa: dos platos de barro antiguos; unas copas del Zara Home; un poquito de retama (ginesta en Cataluña); unos tazones de leche; pan rústico y mermelada de frambuesa que nos vuelve locos. Cómo quería que estuviese relacionado con la obra (en la cual mi maridín pasa más de 10h diarias) le cogí prestados unos barreños y dos chapas que las usan para hormigonar los pilares pero que me parecieron tan ideales para hacerlas servir de mesa…
Fotos de Joanna Noguera Fotografía
Ahora eso si, absteneos si tenéis vértigo porque el andamio es bastante sensible a cualquier movimiento y hay veces que parece que vas subida en un barco.
¿Que os parece la idea? ¿Tomaríais un desayuno en las alturas?
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