Vamos a analizar los diferentes momentos y posibilidades que podría haber para elegir y que vuestra boda salga perfecta.
Acompañamiento en la Iglesia
La opción más habitual es poner un coro, formado por distintas voces, suele quedar muy bien. Para otro tipo de enlaces, sobre todo las bodas civiles, también se suele contratar a un músico o varios con un instrumento de cuerda o varios.
También se podría elegir un cantante solista cantando las clásicas canciones de misa. En este caso, el músico debería acompañarse de un pequeño equipo de sonido para poder llegar a toda la concurrencia de la boda.
Es importante que tengan experiencia en este tipo de actuaciones, ya que tendrán que conocer bien el ritual para sincronizarse bien con el sacerdote.
Amenizando el cóctel
En este caso la mejor opción en nuestra opinión es un trío de Jazz interpretando los estándar de siempre. Un grupo de pop acústico también puede quedar muy bien. Otra opción podría ser un guitarrista, violinista o pianista. En cualquier caso, es conveniente moderar el volumen para que la música quede de fondo.
El hecho de que los cócteles se suelan realizar al aire libre hace que el sonido mejore gracias a la siempre perfecta acústica que hay al no tener rebotes.
El convite y sus momentos especiales
Durante la comida o cena de la boda hay que valorar si el sonido puede hacer que los invitados levanten más la voz de la cuenta y algunos incluso se quejen.
En cuanto a los momentos especiales, poner una canción a la entrada en el salón por parte de los novios, en el corte de la tarta y alguno más del gusto de los contrayentes, puede quedar muy bien y darle un toque distinto a esta parte central de la celebración del matrimonio.
La música de la fiesta
Aquí es donde la fiesta no puede fallar. Lo mejor es contar con grupos musicales para bodas porque la música en directo interpretada por una orquesta transmite una marcha y unas vibraciones muy difíciles de superar en este tipo de eventos.
Lo mejor es que la banda tenga un amplio repertorio para que haya canciones al gusto de todos los invitados y de distintas épocas, desde Elvis y los Beatles, hasta Coldplay o M-Clan.
La orquesta se puede completar con música pinchada por un DJ, que pondrá la parte más electrónica, y menos interpretable por el grupo, al igual que otros géneros como el "flamenquito", salsa, etc.
¡Esperamos que estos tips os puedan servir de ayuda!