Lo primero para conseguir un maquillaje de éxito es conocernos bien, es decir, saber cuáles son nuestros rasgos, nuestro tipo de piel, etc. Queremos potenciar nuestros puntos fuertes y disimular los débiles. ¿Estás preparada? Pues no te pierdas estos consejos.
1. La base de maquillaje
El tono de la base de maquillaje debe ser el tono de tu piel, ni más claro ni más oscuro. Debe ser invisible, es decir, que se funda con tu piel y no se note que lo llevas. Si quieres un tono más bronceado, consíguelo con polvos bronceadores, nada de una base más oscura que la piel o parecerá que llevas una careta. Algo indispensable es que lo pruebes sobre el rostro, que es donde lo vas a aplicar. Si lo pruebas en la mano o el antebrazo, cometerás un error, ya que puede variar el tono de piel.
En cuanto al tipo de base, depende de cada y de sus gustos, pero por norma general, se recomienda lo siguiente:
- Fluida: con un acabado muy natural es perfecta para usarla de día, pero no es la que más cubre.
- En crema: es muy cubriente, pero es la más grasa. Se recomienda para la noche y para pieles maduras.
- Mousse: mucho más ligera que la anterior, por lo que es la mejor opción para pieles jóvenes con pocas imperfecciones.
- Compacto o en barra: cubre mucho las imperfecciones al ser más espeso. Su uso es mejor para el maquillaje de noche.
- En polvo: es la indicada para pieles grasas debido a que matizan más los brillos, en cambio las anteriores pueden aportar más grasa.
La forma de la cara ideal es la ovalada, pero las que no lo tenemos, el maquillaje nos puede ayudar a conseguirlo. Si te atreves con el countouring, así es como debes iluminar y contornear.
2. Colorete o rubor
Existen tendencias en cuanto al color del colorete, pero siempre hay unos colores que favorecen más a nuestro tono de piel. Para pieles claras los colores arena y rosa palo, para un tono medio van bien el melocotón y el malva y para las pieles más oscuras los terracota y los naranjas.
Además, dependiendo de nuestra forma de cara, tendremos que aplicarlo de una forma o de otra para estar más favorecidas. Lo puedes ver en la siguiente imagen:
3. Labios
El pintalabios que escojamos tiene que tener una armonía con el resto del maquillaje y el look en general. Si queremos un mayor impacto, los tonos rojos y más oscuros son lo mejor, pero si queremos un maquillaje natural, lo que buscas son los nude. ¿Cuál es tu tono de piel? Pues dependiendo de cómo sea te quedarán mejor unos colores u otros. Lo puedes ver en la siguiente imagen. ¡Escoge tu labial!
Si ya tienes claro cuál es tu color, ahora queda maquillarlos. Los labios más gruesos suelen resultar más atractivos, así que para dar más sensación de volumen, lo mejor es que pongas en práctica la siguiente técnica.
4. Ojos
Los ojos son la parte más expresiva del rostro y si los maquillamos bien podremos potenciar nuestra mirada. A la hora de elegir los colores, lo que debemos tener en cuenta es el color de nuestros ojos. En la siguiente imagen puedes ver la paleta de tonos para cada color.
A parte del color de los ojos, no menos importante, es imprescindible conocer qué forma tienen nuestros ojos, si son almendrados, caídos, ... No se pueden maquillar de la misma forma, debemos potenciar con la sombra unas zonas u otras.
Una vez que tengas lo anterior, a continuación puedes inspirarte con estos 'paso a paso' para maquillar tus ojos. Estos son perfectos para una boda de día donde se busca una maquillaje más natural.
En una boda de noche puedes enmarcar más tu mirada. ¡mira estas propuestas!
Por último, otro aspecto que no podemos descuidar son las cejas. Pueden arruinar un buen maquillaje si no están arregladas. Además de depilarlas, podemos maquillarlas para marcar más la forma y aumentar su espesor.
Con estas nociones básicas ya estás preparada para maquillarte tú misma. Si vas a una boda o algún evento importante y no tienes mucha práctica, lo mejor es hacer una prueba unos días antes para mejorar la técnica.
¿Te han gustado estos consejos? No dudes en comentarlo en nuestro muro de facebook.