Cuando hace un día con muchas nubes y lluvia todo se ve más oscuro, no es lo mismo lucir tu vestido ni celebrar un cocktail al aire libre con un sol de escándalo y buen tiempo a hacerlo con lluvia y nubes.
Que mejor y más cercano ejemplo que el que nos ofrecieron los Principes de Asturias el día de su boda: aquel 22 de mayo de 2004, en el que muchos aún siguen recordando como anécdota principal todo lo que llovió y lo que la Princesa Letizia temía bajar del coche.
¿A vosotras os llovió en vuestra boda? ¿Cómo os lo tomasteis? Está claro que que llueva en tu día es un incordio, sobre todo por no poder disfrutar igual del banquete (si es al aire libre), de las fotos… pero desde luego no es un mal muy grave.
¿Cómo lo veis vosotras?
Imágenes: abc.es, polkadotbride.com