Daire y Jüri volaron desde su casa en el norte de Europa hasta Marbella para casarse con los únicos testigos que sus hijos pequeños y una pareja de amigos muy cercana.
Eligieron a Sí! Quiero para que les organizara un día muy especial en "petit comité". La ceremonia fue en una cala escondida. Se casaron bajo un gazebo blanco con la música de un violín y las olas del Mediterráneo de fondo.
La novia eligió un vestido sencillo con un mantón, un recogido elegante, un collar de perlas y un ramo de peonías, rosas rosas y con lilas blancas. El novio, como no podía ser de otra forma en una boda en la playa, también iba de blanco impoluto.
Después de la ceremonia celebraron una romántica cena centrada en la gastronomía andaluza en un privé de un hotel con unas vistas maravillosas al mar.
¿Qué os parecen las bodas íntimas?