Este país árabe, lleno de contrastes culturales de todo tipo, resulta que pasar tu luna de miel en Marruecos será que esta experiencia sea plenamente tranquila. Marruecos reúne todos los condimentos para unos días involvidables: parajes naturales como los del desierto del Sáhara ,donde dar un paseo a lomos de un camello y tomar dátiles en una puesta de sol, divisar paisajes de ensueño en playas casi vírgenes o perderte en pequeños pueblos llenos de encanto como Chef Chaoen o Asilah.
Además, Marruecos cuenta con ciudades cosmopolitas, donde tradición y modernidad se unen. Es el caso de Casablanca o de Marrakesh.
Si hay algo que caracteriza al pueblo marroquí es el profundo arraigo a la tradición y sus virtudes más famosas, la hospitalidad, la generosidad, el amor por la familia, el respeto al entorno cultural...En sus jaimas, restaurantes o tiendas, te sentirás como en casa, disfrutando de una conversación franca y distendida con sus paisanos y del sabor del buen té.
¿Os gustaría ir a Marruecos?
Fotos: webislam, geocities,alamaula.com