Esta idea quise aplicarla a nuestra boda, pero como dice el refrán, el que mucho abarca, poco alcanza, y por falta de tiempo no pude ponerla en practica.
Todos sabemos que en las bodas siempre se escapa alguna lagrimilla, claro está que de felicidad, y que en muchas ocasiones nos pilla lejos algún pañuelo. Yo me ví en una de esas.
Era la boda de nuestros amigos Carlos y Susana, la primera boda civil a la que acudíamos, con los respectivos discursos de los amigos y familiares. La mayor parte del tiempo supe contenerme, pero hubo un discurso que nos hizo llorar a todos. Se trataba del hermano de la novia, llegó al micro super emocionado y nada más mencionar las primeras palabras se convirtió en un mar de lagrimas. Acto seguido, te veis a Alex y a mi, los dos llorando como enanos y sin un solo pañuelo, así que Alex terminó secando sus lagrimillas en mi pashmina, mientras yo tuve que aguantar que se secaran al aire para no mancharla de maquillaje.
Cuando ví por internet la idea de entregar a cada invitado un sobrecito con un pañuelo no pude evitar recordar aquella escena y me pareció muy original a la par que útil, quizás no para todos los invitados, porque siempre habrán los típicos hechos de piedra que no lloran ni aunque les pegues.
Así que si vosotras andais bien de tiempo, os animo a que pongais en práctica este tutorial y sorprendais a vuestros invitados con este sobrecito.
Para hacer este DiY vais a necesitar:
- Cartulina A4 (yo en este caso la usé de color craft aunque también podéis usarla blancas)
- Cúter y regla o en su defecto, unas tijeras
- Pegamento de doble cara
- Pañuelos
- Baker’s Twine o cualquier cuerda
- Plantilla: en 3 colores: azul, rosa y verde.
Paso a paso
1. Imprimimos la plantilla en nuestras cartulinas
2. Cortamos con ayuda de un cúter y una regla cada una de los rectángulos. Aunque también podéis hacerlo con tijeras, yo os aconsejo que si son muchas, lo mejor es usar el cúter y la regla o una cizalla.
3. Doblamos el rectángulo en 3 partes por las marcas que se encuentras a la derecha. Nos tienen que quedar dos rectángulos de 8 cm y uno de 2,5 cm.
4. Ponemos un poco de pegamento en los laterales de la pestaña pequeña.
5. Pegamos la pestaña pequeña hacia arriba, formando un bolsillo.
6. Introducimos un pañuelo en el bolsillo.
7. Para terminar y que nuestro sobre quede cerrado, le colocamos la cuerda o el baker’s twine alrededor y formamos un lazo. ¡Nuestros pañuelos para lágrimas de felicidad estará listo para entregar a nuestros invitados!
Para entregarlo, podéis, bien dejar uno en cada silla, colocar una cesta en una mesita y que cada uno se sirva o pedir a alguna amiga que los vaya entregando a los invitados junto con el arroz cuando vayan llegando.
Sencillo, ¿Verdad? ¿Os animáis a hacerlo?
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Fuente: este post proviene de Mi boda DIY, donde puedes consultar el contenido original.
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