Tomar la decisión de tener una boda es una decisión valiente, mucho más cuando se hace la primera unión del mismo sexo en Costa Rica.
La historia de Lalay y Jaz no es distinta a la de muchos. Dos personas, se conocen, se gustan, se enamoran y deciden tener una vida juntas. En Costa Rica, el matrimonio igualitario no se ha legalizado como tal, más algunos meses atrás se logró una reforma a la Ley de la Persona Joven, permitiendo que se garantizaran ciertos derechos a las parejas del mismo sexo.
En ProyectoBodaCR nos interesa presentar uniones de personas que nos inspiran, cuyo amor es un ejemplo y sobretodo cuyas fotografías muestran el esfuerzo, la paciencia y la valentía que con lleva contraer matrimonio, con los colores que sea. Por eso, hoy decidimos compartirles esta unión que lejos de distinta, es tan humana como cualquiera.
La celebración de Lalay y Jaz fué tan esperada y compartida, que tuvieron dos ceremonias: primero una “simbólica” y luego una civil. La primera se realizó de manera alternativa, con un diseño sencillo enfocado en las palabras de la pareja y compartir con sus personas queridas.
La pareja intercambió colgantes de árbol, según nos cuenta la fotógrafa de gran significado para ambas. Eligieron no portar anillos ni otros símolos tradicionales.
Algunas semanas después, aunque la ceremonia de Lalay y Jaz aún era un evento muy íntimo, se dió un segundo evento con un perfil mucho más alto: esta pareja contrajo matrimonio civil.
Con amparo legal, la pareja firmó el protocolo oficializando su unión, de nuevo estuvieron rodeadas de mucho amor de sus amigos y familiares para celebrar esta segunda parte del evento.
La valentía de ser las primeras siempre viene acompañada de un gran reconocimiento de muchos, pero también una serie de adversidades sociales a enfrentar. Pero al final, el amor es la máxima valentía.
#lovewins
Texto por ProyectoBoda
Fotos por Alejandra Vasquez de Cosas Innecesarias
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