Quiero retomar el blog dando la Enhorabuena a mis primos Amanda y Fernando que se casaron el pasado sábado 23 de agosto en Toledo. ¡Estabáis guapísimos y muy felices! ¡Os deseo que esa felicidad os dure para siempre!
Hace unos meses mi tío me preguntó qué podíamos hacer para sorprender a los novios cuando entraran en el salón para el banquete e, inspirándome en los bocadillos de comic que se suelen usar en los photocalls, se me ocurrió hacer carteles como esos con mensajes para que cada mesa sostuviera uno cuando entraran los novios, y así decidimos hacerlo.
Lo primero fue elegir las frases, que fueron las siguientes:
¡Viva los novios!
¡Viva los padrinos!
¡Viva los invitados!
¡Que se besen!
¡Sed muy felices!
¡Qué comáis perdices!
¡Os queremos!
¡Viva el amor!
¡Qué bonito!
¡Viva la barra libre!
¡Sí quiero!
Y como tienen un niño, hicimos uno exclusivamente para él que decía ¡Os quiero mucho! y resulta que el niño lo dio todo agitando el cartel... En esta foto lo podéis ver de pie en la trona con el cartel en alto.
Mi marido y yo nos encargamos de diseñarlos en Powerpoint con distintos tipos de letra, los imprimimos en folios , luego los recorté y los pegué en cartulinas de colores, que recorté con la misma forma del bocadillo para que se viera un borde de color (un color distinto para cada bocadillo) y el cartel se sostuviera mejor gracias a la densidad de la cartulina.
Esta es una muestra de cómo nos quedaron:
Por último, mi tio se encargó de comprar los palitos para sujetar los carteles y se los pegó con cinta de doble cara que fue lo que le aconsejaron en la tienda que resistiría mejor. Como véis son muy fáciles de hacer.
Tuvieron mucho éxito entre los invitados, a los novios les sorprendió y les encantó y además sirvieron para que la gente se hiciera un montón de fotos con ellos durante toda la boda. Es una nueva forma de usar los bocadillos con mensaje sin necesidad de montar un photocall y de sorprender a los novios, que también se merecen que los sorprendamos con nuestro cariño. ¿Qué os parece la idea?