Sólo necesitas: la madera donde quieras transferir tu cartel, un folio, gel fototransfer (lo puedes encontrar en cualquier tienda de manualidades) y un pincel.
Imprimimos el cartel que más nos guste en el folio. Hay que imprimirlo en una impresora a láser. Ten en cuenta que deberás imprimirlo en espejo para que al transferirlo las letras se puedan leer. Después pasamos el pincel empapado en el gel por encima del folio, por la cara impresa. Y tras esto, colocamos el papel sobre la madera y presionamos bien. Hay que dejarlo unas 24 horas para que seque y el dibujo traspase bien en la madera.
Pasadas las 24 horas, con un spray humedecemos el papel y vamos rascando con la yema de los dedos hasta que salgan todos los restos de papel. Y ya tenemos nuestro bonito cartel en madera.
Si quieres darle un aspecto más vintage sólo tienes que pintar un poco la madera con pintura oscura y lijarla un poco por los bordes antes de transferir tu cartel.
¡Muy importante! si quieres que el cartel dure con el paso de los años, le tienes que dar una capa de barniz mate y quedará perfecto.
Para los más impacientes, he descubierto un truco para no tener que esperar las 24 horas del secado. En este vídeo os lo enseñan y la verdad que es facilísimo.
¿Os gusta? No dudéis en enseñarme cómo os quedan!
Nos vemos en el próximo post, besazos!!