¿Temo a la crisis de los 30?No. No la temo porque ya la he pasado. Mi crisis de los 30 fue así de caprichosa y hace justo un año cuando cumplí los 29 apareció. ¿Para qué esperar? Apareció de esa manera que aparecen las crisis. Preguntándome qué estaba haciendo con mi vida (laboral mayormente), si había aprovechado los años, si había dado los pasos adecuados… Apareció de esa manera que nunca había aparecido ninguna crisis en mi. Arrastrándome a tiendas de maquillaje a comprar mi primer pintalabios. Sí, sí, habéis leído bien.. Yo no me había comprado ningún pintalabios hasta hace un año. ¿Me había maquillado? Claro, como una puerta. Tuve mis años mozos de untarme la cara con purpurina, después llegaron los años de pintarme como si me hubieran pegado dos puñetazos en los ojos y después llegaron los años de la cara lavada. Me había maquillado sí pero nunca había comprado nada de maquillaje. Y allí estaba yo, yendo a por un pintalabios y saliendo con dos, con un rimmel, con unos polvos de color, un lápiz para no sé que y otro que valía para hacer ahumados (perdona?que me tengo que ahumar qué?!). Todo ello acompañado de una compañera de trabajo que entendió mi crisis. Todo ello acompañado de las risas del resto de compañeras de trabajo que vieron evolucionar mi raya del ojo.
Así que… pasada la crisis de los 30 a los 29, este año no queda otra cosa que disfrutar! Disfrutar, tomarse unas cervecitas con los amigos, brindar por mis 30 y abrir regalos. Abrir regalos que así si a la crisis le da por volver será mucho más llevadera…. porque esto es así, sentada en el suelo y destrozando papel de regalo todo es más llevadero. Y quién diga que no miente.
Y cuando tenía unos cuantos años menos yo hacía listas de cosas que quería… pero ahora a mis casi 30 resulta que las listas han pasado a llamarse wishlist. Y yo soy muy poco de inglés pero muy de modas así que si la moda dice que wishlist, yo hago wishlist.
Wishlist de mis 30
1. Desde que Diana de PapaMoscas nos enseñó su casa yo decidí que algún día me mudaría allí. Como la cosa es complicada, tengo que traerme un poquito de ella a mi casa… Y estos cuadros me enamoraron cuando los vi! ¿Puede haber unos cuadros más perfectos para mi dormitorio? No, no y no. Si es que desde que los vi, cada noche miro a mi trocito de pared y me los pide.
2. De pequeña adoraba robarle al profesor su sello y estamparlo con todas mis fuerzas en un montón de papeles. Lo adoraba yo y toda mi clase. En los preparativos de mi boda volvió a subirme la fiebre de “sellos, sellos necesito sellos y estampar por todas partes” y ahora ha vuelto a mí. Y juntar sellos y Mary Poppins puede ser lo más. O juntar sellos y cualquier cosa de esas que me molan tanto… Vamos, que La Fábrica de Secretos tiene el sello de Mary Poppins que es bonitísimo… Y anda que no lo estamparía yo en un millón de sitios!
3. Cuando descubrí el Kit para cuando cumples 30 de Ohmykit! dije… esto es para mi! Lo han sacado poco antes de mis 30, después de aquel post que me hizo pensar que quizás los 30 no están nada mal… Y me saco una sonrisa con las babyshower… ya que va a ser cumplir los 30 y en unos días irme a la primera fiesta de mi sobri postiza, que mola tanto que organiza fiestas en su honor antes de llegar…Ya promete esta niña! Y si, venga va… que las palomitas no me van mucho pero mi consorte se pirra por ellas. Y reconozcamos que disfrutar un poco del regalo de otra persona mola mucho.
4. Mi historia con las ballenas es peculiar. Amor y odio. Un romance corto y que por poco acaba en tragedia de las grandes. Una relación que no iba a ninguna parte y que terminó tan tocada que hizo falta tirar de hospital para recuperarse…. pero mi historia con las ballenas está también ligada al momento en el que mi marido y yo nos conocimos en aquel trabajo temporal. Mi colección de objetos balleniles hace mucho que no recibe una incorporación nueva y sólo por la sonrisa y los recuerdos que me sacó esta taza el día que la descubrí en El Tarro de Ideas tiene que ser mía.
5. Corazonadas en general. Entrar en la tienda y arrasar es sólo cuestión de querer comer el resto del mes… Corazonadas es mi tienda oficial, mis amigas ya saben que sus regalos serán de allí siempre y les encanta y yo muero de amor cada vez que en mi casa tenemos paquetinos de Corazonadas.
6. Unas Converse. O dos…Mis Converse rosa han decidido que estos son los último pasos que damos juntos y yo muero por otras Converse rosa pero también por otras de bota de esos modelos edición limitada que sacan a veces a la venta.
… y un puñado de gominolas, una bolsa de pipas, unos amigos y unas cervezas porque a veces nos olvidamos que los mejores regalos son los momentos!!