Hay que ir mirando con tiempo que es lo que más se adapta al hilo argumental del enlace y sobre todo al tipo de bolsillo de los novios. Tanto si es grande como si no lo es tanto (al bolsillo me refiero…), hay que escoger con cabeza y nunca quedarse con la primera opción si solo se ha mirado esa. Hay que tener en cuenta, principalmente, el número de invitados y dónde se va a llevar a cabo el convite; (me encanta esa palabra aunque me recuerde a los abuelos de mis abuelos) si en un restaurante, sala de eventos o en domicilio particular.
En nuestro caso, fue bastante complicado… A parte de que era en casa y teníamos que encontrar a alguien que nos llevara la comida y utensilios necesarios a domicilio… ¡mis padres no se ponían de acuerdo ni p’atrás! Mi madre no quería ni loca vasos de plástico, manteles ni servilletas de papel porque “eso es cutre y no es una fiesta de cumpleaños” (palabras textuales). Ella quería algo más exquisito, delicado, fino y elegante y optamos por visitar mooncatering en San Pedro y San Pablo (Tarragona). Noemí y Albert, muy serviciales y atentos, nos hicieron mil y una propuestas e intentaron adaptarse en el presupuesto para que ese día fuera tal y como los novios deseaban. Pero a pesar de todas estas facilidades, no pudimos contratar el servicio con ellos porque mi querido padre enfocó el catering de otra manera, ni más ni menos, que en una barbacoa.
Chuletas, salchichas, pinchos, etc. Eso era lo que mi padre quería. Comer hasta petar y mi madre aceptó con la condición de que hubiera vajilla, cubertería y copitas de cristal. Para ello contactamos con Buenos Fuegos (Tarragona), donde Horacio y Mónica nos trataron genial. Todo parecía perfecto y casi cerrado cuando la fecha del evento se tuvo que cambiar y ellos no pudieron atendernos en ese día. Fue una pena, ¡porque pintaba muy bien!
Así que, después de exprimir Google buscando alguna cosa que se asemejara a lo que mis progenitores querían, a mi padre se le encendió una lucecita y recordó que tenía un amigo cerca de donde celebrábamos la boda con un restaurante de carne a la brasa espectacular: el Xitxarel·lo (Alcover-Tarragona).
Y así fue, lo hablamos con él y enseguida nos hizo un presupuesto que se ajustaba perfectamente a lo que pedíamos. El menú (que constaba de pinchos de tortilla de patatas, escalivada, carne a la brasa y pan tostado) estuvo delicioso, en abundancia y con un trato excepcional.
Y para poneros los dientes largos aquí van algunas fotitos. (Tenemos pocas, porque en este momento se paró el mundo y la fotógrafa se dedicó a comer, como tiene que ser, también sea dicho)
Nada más que añadir, solo agradeceros que echéis una ojeada y si tenéis cualquier duda, contactéis conmigo sin ningún compromiso, de momento ;)
Y en la próxima entrada, al rico pastel (¡Vais a alucinar!)
Alba, tu organizadora de eventos y wedding planner.