Lo más importante para tener una piel sana y luminosa es tenerla limpia. Para ello es importante seguir una rutina estricta en casa y si podemos hacernos una limpieza de cutis. El martes por la tarde tuve el placer de poder pasar un ratito en Hand Made, un centro bio en la capital, que fue un lujo.
Para empezar me gusto muchísimo el trato, llegue mucho antes y no espere ni un minuto lo que siempre se agradace. Luego el tratamiento fue genial y la piel se quedo limpia, hidratada, nutrida y con una luminosidad especial.
Mi piel es muy sensible, por lo que a veces en las limpiezas de cutis me dañan muchísimo la piel. En este caso al tratarse de productos de ecológicos y naturales la piel no sufre nada. Todo el ritual lo hacen con la firma SeaSkin, la primera línea unisex de cosmética órganica creada en España.
El tratamiento consiste en un masaje para relajarnos y retirar todos los restos de maquillaje. Aunque la crema tiene una textura de aceite no da nada de grasa. A través del masaje van estimulando diferentes puntos de la cara (una técnica cercana a la reflexología) para relajarnos y hacernos sentir mucho mejor.
Después se aplica un peeling para eliminar las células muertas y hacer que la piel respire. La textura es muy fresquita y fácil de aplicar. Los peeling suelen agresivos con la piel, pero al tratarse de un producto órganico no escuece ni pica.
Este producto se puede adquirir para hacernos el tratamiento en casa. Se trata de un polvo que podemos mezclar con té o alguna infusión para aplicarlo cada quince días. El precio más que razonable, así que salta directo a mi whislist.
Con la piel limpia se pone una toalla caliente para acabar de abrir el poro. Según me comento la chica es importante no intentar abrir el poro con vapor, puesto que podemos conseguir que se abra en exceso y la piel se ensucie más. Después de esto llega la extracción de los puntos negros, normalmente en la zona t.
Después de la extracción se aplica una mascarilla de miel pura. De esta forma la piel se calma, se evitan las rojeces excesivas y, sobre todo, queda muy nutrida. Al olor la mascarilla no cabe duda de que estamos hablando de miel natural.
Para mí todo el tratamiento es más que aconsejable. El resultado es un piel limpia (ni rastro de poros sucios) y, sobre todo, con muchísima luminosidad.
Lo ideal es hacernos una seis meses antes de la boda y otra un mes antes si tenemos la piel muy sucia o con tendencia a los puntos negros.
¿Qué tratamientos de belleza tenéis pensado haceros antes del gran día?