Vicky me confesó que lo hacía por él, por su Coco (lo que hace una por amor), lo que quería era que fuera una boda friki y rústica-vintage a la vez, además los vestidos de las damas de honor y los ramos iban a ser de color lila… Mi cabecita se puso a funcionar y éste fue el resultado:
Para el rincón de bienvenida hice un cartel personalizado con los nombres de los novios, la fecha del enlace y la silueta de Yoda, además utilicé la tipografía de Star Wars en toda la cartelería para darle más realismo a la situación. Para completar el lado oscuro, no podían faltar unas espadas láser. El toque rústico vino con la cesta de picnic con banderines donde guardé los pétalos para los invitados, un par de botellas antiguas y un toque de paniculata.
Como siempre sugiero a mis parejas, resulta mucho más cercano situar a los novios mirando hacia los invitados, para que éstos puedan percibir mejor las emociones de los novios. Decidieron hacer la ceremonia de la arena para unir su amor.
El arco de ceremonia del hotel, lo decoramos con unas cortinas de encaje y con dos ramos de flores que confeccionó Arbolande.
También pusimos un rincón con fotos de los amigos y unas chapas muy chulas de Star Wars que hechas por Irene Calvo. Además también hice un árbol de huellas personalizado, que en este caso tenía que ser de la Estrella de la Muerte.
En una boda de verano, lo que no podía faltar es un rincón de limonada, además del montaje, también hicimos unas pegatinas kraft personalizadas con el nombre y la fecha de la boda y diferentes personajes de Star Wars.
Antes de que los invitados pasaran al comedor, tenían que comprobar su lugar en éste seating plan en el que hicimos el cartel de madera a juego con el resto de cartelería y diseñamos el protocolo de mesas personalizado, con espadas láser y la tipografía de Star Wars. El toque rústico lo dieron las ventanas con malla de gallinero y unas ramas de eucalipto preservadas.
Ya en el comedor, los invitados se encontraron con un centro de mesa con rodaja una rodaja de madera, y sobre ésta había un tarro con cinta de yute y paniculata, el número de la mesa de kraft, una rodaja más pequeña con los personajes de Star Wars (era una transferencia hecha una a una a mano) y varias velas para crear un ambiente romántico en el salón.
Al terminar la cena, pasaron a la discoteca donde les esperaba un candy bar y un photocall de Star Wars con carteles personalizados para la ocasión. La impresionante tarta se la curró La Bruja Novata.
Gracias a LorenPhotography por hacer, una vez más, un trabajo impecable con la fotografía.
¿Quieres una boda temática? ¡Déjame que lo haga realidad! Me encantará volver a disfrutar como una enana
Sé feliz
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