1) Este año, al igual que el anterior, continúa siendo tendencia utilizar unas mangas únicas y llenas de gracia para pisar el altar. Pueden ir desde forma de globo, acampanadas, desmontables, abullonadas, caídas, farol, ceñidas, poeta, de mariposa, hasta de murciélago. Este año las mangas serás las que se llevarán todo el protagonismo del look. También puedes optar por jugar con las texturas, como incluir bordados, encajes, pedrería, transparencias, volantes u otras aplicaciones de calidad que demuestren elegancia.
2) Algo imperdonable años atrás era usar vestidos de novia escotados o que muestren piel. Por suerte eso quedó atrás y este año son tendencia las aberturas. Tendrás un gran protagonismo las faldas con aberturas laterales de muy profundas y llamativas. Poe supuesto también se encontrarán aberturas frontales. Estos diseños demuestran sensualidad, y son ideales para aquellas mujeres que buscan presumir sus piernas o enseñar piel de forma sutil.
3) Los vestidos de novia con espalda descubierta están a otro nivel de sensualidad. Este año sin dudas los escotes de espalda son los protagonistas principales, y los que se roban la atención de todo el mundo. Pueden ser escotes totalmente descubiertos o acompañados de tirantes (finos o gruesos) cruzados, filigranas asimétricas y también formas geométricas.
4) Una de las tendencias que causan más revuelo para este año son los vestidos midi, aquellos en los que se juega con el largo de la falda. Algunos no llegan a los tobillos y otros, no llegan a la rodilla. Claramente son menos elegantes que los clásicos, pero son una buena opción para novias mucho más relajadas o para bodas que planean ser mucho más sencillas sin el componente clásico de siempre. Estos vestidos vienen con variaciones de tela, por ejemplo utilizando tul, capas o incluso una desproporción entre el vestido por delante y por detrás. No es un estilo que acostumbremos ver, pero sin dudas queda precioso y es una muy buena opción.
5) Por último, la tendencia más criticada, no solo de este año sino desde que se comenzó a utilizar, y son los vestidos coloridos. Marcas lujosas ofrecen variedad de tonalidades como rojo, lila e incluso negro. El clásico blanco denota “pureza” “inocencia” y gracia a la hora de verlo sobre el altar, estos nuevos colores pretende ir en contra de lo tradicional y típico. ¿Lo usarías?
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