Mi padre intentó aficionarme a la filatelia. Domingo tras domingo íbamos a comprar sellos. ¿De qué quieres coleccionarlos? De animales y flores. ¡Pues claro! Si le preguntas a una niña de qué quiere los sellos te dirá que de animales y flores. Mi afición duro poco… Mi padre tuvo que seguir terminando él aquella colección… A mi me iban los sellos si, pero para chuperretearlos y pegarlos en un sobre decorado con frases tipo “corre, corre cartero para llegar pronto a mi amigo el que más quiero”. Aquello de coger los sellos con pinzas y tenerlos en un álbum no era lo mío.
Así que mi padre siguió con sus pinzas y yo seguí chuperreteándole la coronilla al Rey. De vez en cuando me cansaba y cuando volvía al estanco le decía a la señora: “Por favor, quiero un sello bonito” Y qué feliz era yo cuando sacaban ediciones de Sellos. Ayss Correos cuántas sonrisas me habéis sacado… Eran aquellos tiempos de sobres decorados, de meter más peso del debido en el sobre porque era el cumple de mi novio del pueblo y que las cartas llegaran igual y sólo te dijeran “la próxima vez que meta menos”, eran las mañanas de acosar al cartero en el pueblo para ver si traía algo para mí, eran los tiempos de encontrarte al cartero por la calle y que te gritara: ¡¡¡toma asturiana, que te ha mandado tu madre 5000 pesetas!!! Aysss Correos, qué tiempos aquellos.
Después llegaron los sellos pegatinas… y aunque nada volvió a ser como antes yo seguí fiel al correo postal. Incluso ahora, con el mail y demás… Sigo enviando de vez en cuando cartas de siempre, de las de ir al buzón amarillo.. de las de abrir el buzón y sacarte esa sonrisa que te quita todos los meses la factura de la luz…. Y siempre, siempre mirar el sello que ponía. A ver de qué era, a ver que ilustración llevaba… Y lleva.
Total.. que el otro día en Correos, esperando esa cola, porque sí, vayas a la hora que vayas a Correos siempre habrá cola y los señores de la oficina estarán desplegando una parsimonia ante ti que hace que a los 10 minutos te apetezca saltar por encima del mostrador y decirles: “quita, quita que ya despacho yo. ¿Quién va?” … a lo que iba… Estaba yo leyéndome y aprendiéndome de memoria todos los carteles de la bonita oficina: horarios de recogida, precio de las cajas verde, códigos postales, que ahora lo envías con correos y no por correos, que chronoexpress ahora es también Correos… y de repente veo:
CREA TU SELLO PERSONALIZADO.
¿Cómo? Me salgo de la cola asegurándome antes de que el chico de atrás es majo y me guarda el sitio. Cojo un folleto, vuelvo a mi sitio y ¡¡¡¡ohmygood!!!! ¿Esto qué es lo qué es? ¿Esto cuándo lo han inventado? ¿Lo había en el 2012 y yo no me enteré?
Ays, ays, ays… que me da un parraque!!! SELLOS PERSONALIZADOS.
Y vosotros diréis, si, y qué? ¿¿¿Cómo qué y qué??? SELLOS PERSONALIZADOS. Sellos personalizados y bodas. No digo más.
¿Sabéis lo que tiene que molar enviar tu invitación de tu boda con un sello que sea vuestro logo de la boda? O una foto vuestra, o vuestros nombres… Eso es lo más! Lo más de lo más de la personalización.
“Toma tía del pueblo, que te invito a mi boda en la cual molan hasta los sellos” Y a mi me da un parraque. Y pienso en la ilusión que a mi abuela le habría hecho recibir una invitación con sello personalizado. Porque aunque el de la oficina de turno le hubiera puesto todo el matasellos en medio, mi abuela habría ido a enseñarle a todo el pueblo el sello de la boda de su nieta la de Asturias. Podéis reíros pero sé que lo hubiera hecho, que estuvo muchos días saliendo a sentarse a la puerta de casa a la hora del fresquito con la invitación debajo del culo para enseñarla a todo aquel que pasara por la calle…
Y me voy de la oficina de Correos y se lo enseño a mi marido. Él me mira y me dice: “menos mal que no descubriste esto antes de la boda, porque hubiera sido un gasto más” Y qué? Qué más da? Si, es cierto… Crear los sellos personalizados sale un pelín más caro que ir al estanco y comprar los sellos normales… pero por favor… es tan genial enviar una invitación de boda con un sello personalizado!!!
¿Y esto como se hace? Fácil y sencillo. Pincha en el siguiente enlace “sellos que molan más que los de la cara del Rey” y empieza a personalizar tus sellos. Seamos sensatos, si vas a enviar dos o tres invitaciones por correo no te compensa… pero si tienes muchos invitados lejos y se las vas a hacer llegar así… diseña ya!!! Porque una boda empieza para tus invitados en el momento en el que reciben la invitación y personalizarla desde ese punto mola mucho.
Señores que matan los sellos en Correos, por favor, ya que los sellos son bonitos, que los hemos diseñado, pagado… no nos pongan ustedes el matasellos en medio.. En una esquinita es suficiente. ¿Qué fijarse les lleva tiempo? No pasa nada,estamos acostumbrados a las colas en sus oficinas, no nos pillara de nuevas esperar un poquito más…