Carolina fue una novia muy organizada y puntual: ella organizó, diseñó su propia boda y escogió cada proveedor desde las flores, mantelería, lugar del evento, postres, sillas y música.
La paleta de colores de la boda estuvo compuesta de coral pálido, dorado y marfil.
Cada detalle fue cuidadosamente pensado, los centros de mesa, las flores y un romántico árbol de los deseos.
Fue un hermoso día soleado. La ceremonia estuvo decorada con telas y ramitos de flores, y acompañada de música clásica.
El lugar de la boda fue en Campo Lago y la ceremonia se realizo bajo un árbol en horas de la mañana. Fue una boda íntima con amigos cercanos y familiares, llena de mucho amor, cariño y alegría.
Carolina y Juan Pablo lucieron felices, sonrientes y radiantes
Carolina fue una novia muy especial, y afortunadamente logramos una cercanía especial, como de amigas. Además, tuve el gusto de conocer parte de su familia y amigas desde antes de la boda, en su té de soltera.
¡Gracias a los dos, los quiero mucho!
Texto de la fotógrafa: Adri Méndez
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Noviatica – Novias de Costa Rica