Hoy toca ponerse nostálgica con una entrada de hace bastantes años, cuando publique esta boda lo que más me llamó la atención de ella era la espontaneidad de los novios y ese aire rockabilly que se respira en cada detalle de la boda.
Amanda es una chica de Texas, pero se trasladó a Nueva York para trabajar allí y el destino la tenía preparado un encuentro fortuito en una tienda de frutos secos con su alma gemela Steven.
El vestido de la novia no puede ser más original y la combinación curiosa de tejidos le queda perfecta, le da mucha personalidad y notas de originalidad.
El traje de la novia se compone de una camisa de cuadros en tonos pastel, combinada con una larga falda de tull en color blanco roto.
El novio destaca por vestir un traje de estilo muy roquero combinado con camisa y corbata en tonos salmón, peinado con su particular tupé.
Las invitaciones del evento destacan por ser alegres utilizando los perfiles del rostro que tanto caracterizan a los novios.
Una ceremonia de lo más divertida utilizando detalles muy personales que tanto les gustan a los novios.
Mesas divertidas y coloristas que utilizan vajillas de diferentes porcelanas acompañadas de cubertería de nácar.
Me encantan estas bodas íntimas, nada tiene que envidiar a las grandes bodas llenas
de gente, yo apuesto por una boda así.¿Os gusta esta idea de boda poco convencional?
Fotos Greenwedding
Espero que os haya gustado!!
Feliz día!!