Volvemos a las letras después de unos días de descanso y que mejor para empezar un nuevo ciclo de actividades, que con la historia de amor del mes!
Hoy te traigo una boda muy hermosa llena de naturaleza y color.
Que además fue celebrada en un lugar muy particular: un viñedo! y todos los detalles de este matrimonio, han girado en torno a este.
Una pareja de novios muy dulce, decidió festejar el día mas importante de su amor en donde nacen los vinos y así el campo y la naturaleza fueron el ambiente que rodeó a estos nuevos esposos y sus invitados el día de su boda.
Todo, todito, fue maravilloso una novia sin par, que su cortejo estuvo genial, pues los brillos de sus vestidos iluminaron el festejo.
Los tonos otoñales hicieron la gala desde la entrada hasta el ponqué, mucha madera, mucha naturaleza. Todo giro en torno al vino y lo que le acompaña, (viste la mesa de quesos?) todo ideal para los amantes de esta bebida.
La pajecita con su coronita nos recordaba a los dioses, uhh todo tan lleno de verde y flores, que hermoso!
La novia llego en una antigua van y allí la esperaban ansiosos los invitados, en una ceremonia con sillas de diferentes estilos, pero todas en madera eso si. Un caminito de hojas secas y sillas decoradas con frascos reciclados adornados con pequeños ramitos esperaban por la entrada triunfal de l novia
Arreglos aéreos y centros de mesa sencillos en botellas de vino hicieron la gala de este matrimonio maravilloso.
Y así es como una dulce y original pareja amante de los vinos y las uvas recrearon su pasión en el día mas importante de sus vidas!
que viva el amor!!
Por Sandra González
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