Tras la boda del príncipe Carlos Felipe de Suecia, no podía dejar de recordar a alguna de las novias “reales” más “memorables”.
Son vestidos de diferentes siluetas, pero todos tienen algo en común: han marcado tendencia en una época.
¿Queréis ver cuáles son mis elegidos?.
Evidentemente, el vestido de novia de Diana de Gales tenía que estar en esta lista. Diseñado por David & Elizabeth Emmanuel, fue el prototipo de “vestido de princesa” de la época. Muy recargado, mangas abullonadas, y volantes, el diseño bordado nada menos que con más de 10000 perlas tenía una cola de unoas 7 metros!!
La siguiente es la princesa Stephanie de Luxemburgo. El impresionante diseño de Elie Saab le ha hecho tener un hueco en esta lista. El diseño, con manga al codo, miles de lentejuelas y encaje tenía una cola de 4’5 metros.
La princesa Mette-Marit de Noruega lució en su día un sencillo diseño pero con un gran valor sentimental, ya que estaba inspirado en el que llevó la bisabuela del príncipe Haakon el día de su boda.
La Duquesa de Cambridge llevó un precioso diseño de Sarah Burton para Alexander McQueen el día de su boda con Guillermo de Inglaterra.
Máxima de Holanda, llevó un precioso Valentino de manga larga y cuello redondeado. Una espectacular boda daba el toque final al diseño.
Rania de Jordania llevó un vestido muy acorde a la época en la que se casó (principios de los 90). Con chaqueta de manga corta con la solapa y las mangas bordadas en oro llevaba un velo colocado muy abullonado, sujeto a un alto moño.
Charlene de Mónaco llevó un vestido de Armani muy minimalista. Ceñido y con una larga cola, destacaba por el bordado frontal y su cuello barco.
Y de una princesa de Mónaco…a otra. La suegra de Charlene, la princesa Grace, llevó este diseño que quedará para la historia el día de su boda con el príncipe Rainiero.
La australiana Mary Donaldson eligió a un diseñador danés, Uffe Frank, para el diseño del vestido que luciría el día que se convirtiera en princesa de Dinamarca. Blanco nacarado, con cuello barco y manga al codo, destacó principalmente por los pliegues de su falda.
La princesa Victoria, heredera del trono sueco, llevó en su boda un diseño de Pär Engsheden color crema en seda duquesa satinada con un escote barco y manga corta.
Su hermana Magdalena, por el contrario, se decantó por un diseñador de fama internacional como Valentino para que creara el vestido de su boda. Encaje, cuello barco y pequeñas mangas junto a un volante enorme en el bajo y una cola de 4 metros fueron los detalles elegidos…
Y, para terminar, tenía que meter en esta recopilación a la reina Letizia. El responsable de su vestido de novia fue el diseñador Manuel Pertegaz. Era un vestido de seda con hilo de plata en color blanco roto. Además, llevaba una cola de 4’5 metros.