Preparar un boda íntima y con poquita gente no tiene porqué ser aburrida o sosa. Esta boda en el bosque, es el vivo ejemplo. Una mesa de madera, un mantel con un bonito estampado, una vajilla con algún detalle y un centro floral espectacular como el que han elegido, jugado con flores secas y naturales, será un acierto seguro para tus invitados.
Y además de esto, para tener otro recuerdo especial de ese día, con cuatro troncos, unas plantas, una manta y unos cojines han preparado un bonito escenario para hacer la sesión de fotos.
¿Qué te ha parecido la decoración de esta boda?
¿Tú también prefieres las bodas rústicas?
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