¿Quieres maquillarte tú misma en para tu boda? Este es un tema muy delicado en el que las novias suelen tener muchas dudas. Es decir, en mi opinión personal, si te vas a casar y no te apasiona el mundo del maquillaje y la cosmética y/o no sueles maquillarte, no lo dudes ni un momento y acude a un profesional. Haz una o todas las pruebas necesarias para encontrar los tonos y el estilo de maquillaje con el que te sientas más cómoda en tu gran día.
Si por el contrario, tienes cierto arte y sapiencia en el tema del maquillaje, ¿por qué no hacerlo tú misma? Nadie conocerá tu rostro ni tus gustos mejor que tú. Al menos es lo que siento que me ocurre a mí. Tengo cierto conocimiento del tema (he hecho algún curso de maquillaje y auto maquillaje) y no me siento cómoda 100% cuando me maquilla otra persona. Eso no quiere decir que no lo hagan bien, sino que en el fondo es muy complicado que alguien que no te conoce acierte de primeras con tu estilo personal. Y ya sabéis que una novia no debería renunciar a eso.
Lo que sí ocurre es que el maquillaje de novia tiene algunas peculiaridades que no comparte con el maquillaje habitual, ya sea de día o de noche. Así que si te vas a lanzar a hacerlo tú misma, aquí te dejo algunos consejos que creo que te ayudarán a estar radiante.
Prepara tu rostro antes del maquillaje. Esto no es solo el sentido común de limpiar + tonificar+ hidratar. Ese día necesitas un plus que unifique tu cutis, disimule imperfecciones y resalte tu belleza natural. Básicamente existen dos maneras de conseguir esto: los tratamientos de belleza flash, que normalmente se comercializan en ampollas monodosis, o las famosas prebases de maquillaje.
Debatir si una opción es mejor que otra, podría llevarnos varias horas, días, semanas? Ambos productos tienen fieles seguidores y detractores. Las ampollas, entre sus beneficios aportan una dosis extra de hidratación, tienen un ligero efecto lifting que atenúa las líneas de expresión y ayudan a fijar el maquillaje. Sin embargo, si tienes la piel seca, quizá no sea el producto más recomendable del mundo.
Las prebases se han popularizado mucho en los últimos tiempos. Sirven para afinar el cutis y unificar la piel, dejando una base uniforme preparada para recibir el fondo de maquillaje. El gran pero de estos productos es que la mayoría están formulados a base de siliconas, material que tiende a o obstruir los poros de nuestra piel y que nos puede juagar una mala pasada si hace mucho calor o si tenemos la piel sensible.
¿Existe alguna solución intermedia? Sí! O al menos yo creo haber descubierto una, que me funciona de maravilla. Se trata del Bálsamo de Belleza Relámpago de Clarins: potencia la luminosidad, atenúa signos de cansancio, hidrata y unifica el cutis y gracias a su textura en crema es muy fácil de aplicar. Su precio ronda los 36 euros.
Acierta con la base de maquillaje. Para este día tan especial es posible que necesites un fondo de maquillaje diferente al que sueles utilizar. Hay dos motivos principales: el primero es que necesitas un producto de larga duración y el segundo es que vas a ser muy muy fotografiada ese día, y necesitas una base que responda bien ante los focos y los flashes.
Con respecto a lo primero, no hay duda de que es cuestión de necesidad: ese día, independientemente de las horas que trascurran desde que te maquilles hasta que te acuestes, vas a reír, llorar, te van a dar besos, abrazos, etc. La base de maquillaje tiene que permanecer en su sitio y sin agrietarse/oxidarse el máximo tiempo posible. Como ayuda puedes recurrir a un spray fiajdor, una vez que te hayas terminado de maquillar, que aportará un plus de duración a todo el conjunto.
Sobre las bases que funcionan bien para fotografía, te diré que la máxima que se utiliza es que hay que evitar los brillos a toda costa. Por eso, tienes que tener especial cuidado si tienes la piel mixta o grasa y elegir una base oil free. Además, es muy importante que no utilices productos de base mineral o que contengan factor de protección solar. Estos productos reflejan con el flash, y crean un efecto blanquecino que no vas a querer tener de recuerdo en las fotos de tu boda. Si hace mucho calor, necesitarás dos aliados imprescindibles a mano para controlar los brillos: unos pañuelos de papel tipo tisús para secar el sudor (no restregar eh!) y una polvera de polvos sueltos traslucidos para matizar.
Aquí tienes un ejemplo de lo que quiero decir. Seguro que Drew Barrimore estaba guapísima el día que le hicieron esta foto, pero un corrector- iluminador con partículas brillantes o minerales, arruinó todas las fotos que se hizo ese día.
A estos dos factores, tienes que añadir el grado de cobertura que te gusta o necesitas. Yo no soy muy partidaria de las bases de cobertura total, si tienes un poco de maña, creo que con un buen corrector y una base de cobertura media para unificar el tono tienes más que suficiente para tener una piel bonita y de aspecto natural.
Aquí os dejo las dos bases más recomendadas por todas las maquilladoras profesionales que conozco para el gran día: Face & Body de Mac (30 euros aprox.) y Face & Body de Make Up Forever (41 euros aprox.). Los dos productos son muy parecidos: oil free, cobertura media modulable (se pueden añadir capas), son waterproof, de larga duración? En general, para tema de fotografía, suele ganar la de Make Up Forever pero vamos, que supongo que dependerá del tipo de piel y de los gustos de cada uno. Lo bueno de ambas es que están especialmente formuladas para que además del rostro puedas dar unas pinceladas de color a escote, hombros, orejas, etc.
El maquillaje de los ojos. No hay normas escritas sobre cómo debes maquillarte los ojos: habrá quien se encuentre más cómoda con una mirada muy marcada, y quien necesitará un look más limpio. Solo voy a apuntar tres consejos que creo que son aplicables a todos los maquillajes de novia.
Aplica una prebase específica en los párpados. Esto facilitará que tus sombras de ojos se difuminen mejor y permanezcan más tiempo inalterables. Yo soy muy fan de la prebase Shadow Insurance de Too Faced, que cuesta unos 18 euros y se vende en Sephora.
Elige sombras en tonos neutros y de acabado mate. Como ya te he comentado la fotografía y los brillos no se llevan del todo bien, así que si quieres estar radiante en las instantáneas de la boda, evita los acabados metalizados, perlados o con purpurina. Así mismo, también es un consejo de manual que huyas de los tonos estridentes o de tendencia como los verdes, azules, o morados y optes por colores neutros, de la gama de los marrones. Evita las sombras rosadas, ya que en cámara pueden dar un aspecto de cansancio o irritación. Opta mejor por tonos claros de base más amarilla.
Si no quieres una mirada muy perfilada, o si la boda es de día, opta por maquillar la línea de agua (la de dentro de las pestañas) con un lápiz color nude/beige, esto aportará un toque extra de luminosidad a tu mirada.
Colorete. Será lo primero que desaparezca cuando empieces a recibir los besos y abrazos de tus amigos y familiares. Además de apostar por un producto de calidad (mate a ser posible, ya sabes), si eliges un tono ligeramente rosado, aportarás jovialidad y lozanía a tu aspecto. Difumínalo a conciencia y llévalo en tu neceser para retocarlo cada dos o tres horas.
Labios. La recomendación básica es que también huyas de los tonos tendencia y optes por un color de labios con el que te sientas cómoda. Si quieres un acabado tipo gloss, mi recomendación es que no caigas en el típico dúo comercial de barra labial fija + brillo (tipo Lipfinity) ya que los resultados a la larga son un poco lamentables. Es mucho mejor que apuestes por un buen perfilador para dar forma y rellenar el labio y apliques sobre él o una barra hidratante o un gloss del mismo tono (obligatorio: Nunca mais labios perfilados más oscuros que el relleno, por Dior!). Si la aplicación la haces con pincel, te aseguras de fijarlo bien, por lo que durará más tiempo intacto, y podrás jugar con la intensidad del color.
Y para inspiración, ya sabes que Internet está repleto de extensos tutoriales tanto en foto como en vídeo para crear looks de todo tipo. Eso sí, una vez que hayas elegido el tipo de look que lucirás, no te canses de practicarlo una y otra vez para que lo tengas totalmente dominado el día de la boda. Así mismo, si tienes la piel sensible, no se te ocurra estrenar ningún producto por primera vez ni el día D ni la semana de antes. Las alergias por contacto pueden tardar hasta cuatro o más días en aflorar, y lo que es seguro es que no querrás llegar al altar con un bonito sarpullido facial.
-Noemi
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