Un abrigo largo, recto y en color crudo puede ser una buenísima opción para vestidos largos y clásicos, de corte recto. El segundo, con un toque más moderno, para novias atrevidas, modernas y desenfadadas.
El tercer abrigo me encanta, con el toque metalizado, tan de moda últimamente en los accesorios nupciales. Y el cuarto, es el más común. Una especie de abrigo-toquilla con transparencia en color crudo, muy vintage.
¿Os casaríais en invierno, con abrigo incluído?
Fotos.bodaclick, Nuvisystem, Todoboda.